Maria Masip Oriol

«Tu, Señor, me darás gracia para serte esposa fiel,

que te ame mucho y te sirva en la persona de los enfermos y desvalidos.

Y un día me dirás: Entra, porque estuve enfermo y me socorriste;

entra, porque tu lámpara siempre ardió.»

(Beata Ana María Janer)

Nuestra hermana Ma. Dolors Masip, nos ha dejado de forma silenciosa y con mucha paz. Es seguro que Dios Padre la ha acogido en sus brazos y la tiene cerca de Él. Ahora no nos despedimos de ella, la encomendamos a la bondad y misericordia de Dios. Es por eso por lo que le decimos: ¡¡¡en el cielo nos veremos!!! Porque ella permanece con nosotras por su buen recuerdo, por su vida de testimonio fiel y ejemplar, como religiosa y como hermana de la comunidad.

Ella nos ha enseñado con su fe profunda vivida:

- en el trato de amistad con Dios por la oración

- la integración y participación en la vida comunitaria

- en la entrega incondicional a los demás.

- en la devoción profunda, a la Eucaristía, a la Virgen María, a la Madre Janer...

Que tu encuentro con Dios sea de intercesión:

- Por tu familia que tanto has amado y te ha amado.

- Por tus amigos y conocidos.

- Por la familia que formamos los que en esta casa convivimos, ayudándonos unos a los otros.

- Por nuestra Familia Religiosa, por toda la familia janeriana, para que nuestras vidas «sean para los demás» como lo hizo la Beata Ana María Janer.

¡GRACIAS, hermana Maria!

-Visitación Lorenzo Herrero-